Descubre la magia entre los viñedos de España
¡Un plan perfecto para los amantes del vino y la gastronomía!
La producción de vino tiene mucho peso en España, tanto que se ha convertido en un atractivo diferenciador respecto a otros destinos. Asimismo, cada vez se está apostando más por esta tipología de turismo, ya que España se configura como el tercer país productor mundial de vino, después de Italia y Francia, con una producción de aproximadamente 40 millones de hectolitros.
Esta abundancia de viñas hace que haya un crecimiento constante de las infraestructuras y servicios relacionados con el turismo enológico. Dentro de esta tipología turística podemos encontrar un amplio abanico de experiencias como pueden ser desde la tradicional visita a bodega donde se enseña al turista el proceso de elaboración del vino, hasta degustaciones y catas o visitas a viñedos. Es por ello que os hablaremos de algunos de los lugares más destacados del enoturismo en España.
Comer, beber y viajar. ¿Qué más se puede pedir?
Empezando por el norte de la península, encontramos La Rioja. Un lugar donde la cultura del vino es una forma de vida, con una cifra aproximada de 800 bodegas. Podrás disfrutar de una visita al Museo del Vino y aprender disfrutando en un curso de cata. Otra experiencia única es comer en una bodega y disfrutar de un menú maridado. Pero esto no es todo, se puede disfrutar del vino incluso sin beberlo, con un relajante tratamiento de vinoterapia.
En el litoral mediterráneo nos encontramos la comarca barcelonesa del Penedés, que cuenta con un total de 188 bodegas y 24.248 hectáreas de viñedos. Es conocida por la producción del mejor cava del mundo y donde se concentra la producción del 90% del cava que se produce en España. También destacan sus vinos blancos, tratándose de vinos ligeros y aromáticos.
Y si nos desplazamos hasta el extremo sur de la península encontraremos el Marco de Jerez, una región vitivinícola donde se producen los Vinos de Jerez, únicos en el mundo. Con casi 7.000 hectáreas de viñedos y 60 bodegas. Sus privilegiadas condiciones climatológicas propician el cultivo de tres variedades de uva: Palomino, utilizada para vinos secos, Pedro Ximénez y Moscatel, ambas utilizadas para vinos dulces.
¿Y tú, te animas a hacer turismo enológico?